دانلود کتاب Las Razas Caninas de Fiorenzo Fiorone

PREFACIO
¿Desde cuándo se habla y se escribe sobre el perro? ¿Desde cuándo se le entonan alabanzas? No lo sabemos. Casi podríamos decir que desde siempre, porque desde siempre el perro ha sido el mejor amigo del hombre. ¿Se trata de una frase retórica? De ningún modo. Hace ya milenios que el Canis familiaris, como se lo verá designado a lo largo de esta obra, se ha convertido en el compañero y la escolta vigilante
del hombre, secundándolo en el trabajo y en el ocio. Y hace ya milenios que los hombres, aun hiperbólicamente, reconocen sus virtudes. Jenofonte lo llamó "invento de los dioses"; Sócrates juraba sobre
su cabeza; Plutarco inmortalizó a Melampo, que siguió a su amo sobre las olas; Alejandro el Grande dijo: "Si no fuera hombre querría ser perro"', y tanto le dolió la pérdida de uno de sus favoritos,
que hizo levantar una ciudad en su honor. Más cerca de nosotros, el célebre naturalista Buffon reconoció en el perro, aunadas a la belleza, la
vivacidad, la agilidad y la fuerza, todas las cualidades interiores que le permiten intuir los sentimientos del hombre. De allí que éste le dedicara su permanente atención, progresando en sus conocimientos
y afinando su conducta, hasta culminar en la cinofilia actual, una pasión que conjuga el sentimiento con la ciencia. La cinofilia aspira a asegurar para el perro condiciones de vida adecuadas a su naturaleza, y en
definitiva mejores, que incluyen la presencia y asistencia invariables de un amo. ¿Cómo lograrlo? Ante todo preservando la transmisión de los rasgos, la pureza de las razas, en función de su empleo. Pero, ¿qué significa realmente " raza pura"? En zootecnia, se dice que pertenecen a una " raza pura" aquellos animales domésticos que al reproducirse, transmiten de manera constante sus propias características morfológicas y psíquicas y sus aptitudes para cumplir determinadas tareas.
Las diversas variedades de perros hoy reconocidas como "razas caninas puras" se formaron en el curso de la historia humana por obra de distintos factores: geográficos, climáticos, sociales. Otras surgieron de cruces destinados a obtener perros aptos para empleos particulares, y éste es, en realidad. el origen de las "razas caninas puras" tal como hoy las conocemos. La utilidad práctica de crear seleccionando según la raza, es evidente, si se considera que las probabilidades de reproducir las dotes y características de los padres son mayores cuanto mayor es su
homogeneidad genética.